Evolución de las prácticas periodísticas hacia las personas mayores en España. La pandemia del COVID-19 como punto de inflexión

Abstract

En España, la población mayor de 65 años sumaba en enero de 2022, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), un total de 9,5 millones de personas. Un grupo poblacional que, a nivel mediático, ha padecido infrarrepresentación y falta de voz junto con una construcción del discurso que los exponía como víctimas y que ponía el foco en el edadismo, mostrándolos incapaces de valerse por sí mismos o de aportar algo al conjunto de la sociedad. El uso de términos paternalistas y peyorativos para referirse a ellos y ellas a la hora de emitir o redactar una noticia, es algo a lo que estamos habituados. Unas prácticas, sin embargo, muy alejadas del respeto y la dignidad hacia las personas, que reclaman los códigos deontológicos del periodismo. Esta investigación concluye que las prácticas periodísticas hacia los mayores han mejorado en los últimos años. Una época coincidente con la pandemia del COVID-19, que habría supuesto un punto de inflexión, al poner de manifiesto el maltrato que reciben las personas mayores y la gerontofobia existente en la sociedad.

According to data from the National Institute of Statistics (INE), in Spain the population considered to be Senior Citizens (aged 65 and over) totalled 9,5 million people in January 2022. This is a population group that has suffered from a media treatment characterised by underrepresentation and lack of voice, accompanied by a media discourse that exposed them as victims and put the focus on edadism, showing them as incapable of fending for themselves or contributing something to society as a whole. The use of paternalistic and pejorative terms to refer to them when broadcasting or writing news, is something we are used to. These practices, however, are far removed from the respect and dignity towards people demanded by the codes of ethics in journalism. The aim of this research is to determine whether these journalistic practices are evolving and have improved in recent years. A period of time, in which COVID-19 pandemic would have been a turning point by opening our eyes to the bad treatment the older usually get and the existing gerontophobia in society.